Ventajas y desventajas del transporte marítimo
El transporte marítimo es, en el ámbito mundial, el modo más utilizado para el comercio internacional. Es el que soporta mayor movimiento de mercancías, tanto en contenedor como a granel ya sea líquido, seco, con temperatura controlada, carga general u sobredimensionada.
Ventajas:
Volumen y capacidad de almacenaje de los buques: los barcos son los medios de transporte que ofrecen una mayor capacidad a la hora de trasladar más cantidad de materiales.
Fletes más competitivos: los fletes marítimos son por norma general muy competitivos y económicos. Más económico que el transporte aéreo y terrestre.
Seguridad y estabilidad: las condiciones climatológicas y meteorológicas retrasan en mayor número de ocasiones la salida o llegada de un avión, mientras que gracias a la robustez, resistencia y fiabilidad de los buques estos pueden desenvolverse con mayor facilidad en ambientes más complicados o inestables (siempre dentro de unos límites razonables lógicamente).
Mayor variedad de productos y materias transportables: considerado como uno de los elementos más destacables podemos observar como a diferencia de lo que ocurre en el transporte aéreo (donde en la mayoría de ocasiones no se permite carga líquida o peligrosa o si es carga de más de 160cm requiere tipo de avión llamado carguero) el transporte marítimo es la única vía disponible para llevar a buen puerto esta serie de encargos basados en específicos materiales (petróleo, aceites…).
Cobertura y seguro: gracias al hecho de que casi ¾ partes de la tierra están cubiertas de agua el nivel de alcance de este medio es casi absoluto.
Desventajas:
La tramitología es relativamente extensa/complicada, aun cuando los servicios de agentes de aduanas en gran medida el trabajo el número de permisos y formularios es superior a cualquier otro medio (aéreo/terrestre).
Tiempo: este factor también se tiene que tener en cuenta a la hora de prever fechas de entrega, puesto que el tiempo que requiere –especialmente en largas distancias- es por norma general más elevado que el transporte aéreo/terrestre.